Incrustaciones Dentales
Una solución Conservadora, estética y altamente resistente
Las incrustaciones dentales son una excelente alternativa a las coronas tradicionales cuando se busca restaurar dientes dañados sin necesidad de desgastar una gran cantidad de estructura dental sana. Estas restauraciones personalizadas no solo ofrecen resistencia y estética, sino que también preservan la mayor cantidad posible del diente original, asegurando funcionalidad y durabilidad a largo plazo.
¿Cuándo recomendamos una incrustación?
Dientes con daño extenso pero no completo
Cuando la caries o el desgaste afecta una gran porción del diente, pero aún conserva suficiente estructura sana para evitar una corona. Si el daño compromete las cúspides (protuberancias del diente), una incrustación, como un onlay u overlay, ofrece mayor estabilidad que una resina convencional.
Casos donde una curación de resina compuesta no es suficiente
En dientes tratados previamente con curaciones grandes que no ofrecen la resistencia adecuada para soportar las fuerzas masticatorias a largo plazo; Las incrustaciones son ideales para zonas de alta presión, como molares, donde una curación de resina podría fracturarse o desgastarse rápidamente.
Fracturas o fisuras dentales
Cuando un diente tiene una fisura o fractura que no compromete toda la corona del diente, una incrustación puede reforzar la estructura dañada sin necesidad de colocar una corona total.
Dientes tratados con endodoncia
Los dientes que han recibido tratamiento de conducto a menudo necesitan mayor refuerzo debido a la pérdida de estructura dental. En estos casos, las incrustaciones brindan una solución conservadora que protege el diente tratado.
Pacientes que buscan un enfoque menos invasivo
Para quienes desean preservar la mayor cantidad posible de su diente natural y evitar el desgaste innecesario que implica una corona, las incrustaciones son una alternativa ideal.
Tipos de Incrustaciones Dentales
Inlay
Ideal para reparar daños que afectan solo la parte interna del diente, como los surcos o las cúspides más pequeñas.Se utiliza en cavidades donde el daño no compromete las paredes externas del diente.Brinda un ajuste perfecto, asegurando un sellado óptimo que reduce el riesgo de filtraciones futuras.
Onlay
Se extiende para cubrir una o más cúspides del diente, además de reparar su interior.Es una solución ideal cuando el daño es mayor y compromete una parte más extensa del diente, pero no tanto como para requerir una corona completa.Proporciona estabilidad y fuerza adicionales, preservando al mismo tiempo más estructura dental que una corona.
Overlay
Cubre completamente las cúspides del diente y una parte de la superficie externa, pero no llega hasta el margen gingival como una corona.Es la opción más cercana a una corona, siendo la indicada para casos donde se necesita máxima resistencia sin desgastar todo el diente.Perfecta para dientes con daños extensos que aún conservan suficiente estructura sana.
Ventajas en comparación con las resinas compuestas
Durabilidad y resistencia
Las incrustaciones, fabricadas con materiales como cerámica o disilicato de litio, son significativamente más resistentes que las resinas compuestas, lo que las hace ideales para áreas de alta presión masticatoria.
Mayor precisión y sellado
Su diseño personalizado ofrece un ajuste perfecto, reduciendo al mínimo el riesgo de filtración o caries secundarias.
Conservación de la estética
Las incrustaciones no solo son más duraderas, sino que también mantienen su apariencia con el tiempo, a diferencia de las resinas, que pueden mancharse o desgastarse.
¿Por Qué Elegir Incrustaciones Dentales en Lugar de Coronas?
A diferencia de las coronas, las incrustaciones requieren un menor desgaste del diente original. Esto permite conservar más tejido sano y mantener la vitalidad del diente.
A pesar de ser menos invasivas, las incrustaciones son altamente resistentes y están diseñadas para soportar las fuerzas de masticación.Materiales como el disilicato de litio o la cerámica proporcionan una resistencia comparable a la de las coronas, garantizando un resultado duradero.
Fabricadas en materiales que imitan perfectamente el color y la translucidez del diente natural, las incrustaciones se integran de manera casi invisible con el resto de la dentadura.
El tratamiento es menos agresivo, lo que reduce la posibilidad de sensibilidad dental o daños en la pulpa del diente.
Las incrustaciones son una solución ideal para caries grandes, fracturas dentales o dientes que ya han sido tratados con endodoncia y necesitan refuerzo.
¿Cómo se Realizan las Incrustaciones Dentales?
Se realiza una evaluación para determinar el daño y elegir el tipo de incrustación adecuada.
Se elimina la caries o tejido dañado, y se toma una impresión o escaner para luego diseñar la incrustación personalizada.
Una vez fabricada, la incrustación se prueba para asegurar un ajuste perfecto y luego se cementa de manera permanente.
Las incrustaciones dentales no solo restauran la función y la estética de los dientes, sino que también ofrecen un enfoque más conservador y eficiente para el cuidado dental. Su resistencia y estética hacen que sean una opción ideal para quienes buscan una restauración de alta calidad y bajo impacto en la estructura dental.
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